Los rojos iniciaron con todo el compromiso, decididos a quedarse con la victoria. Melgar y Chajtur se mostraron ansiosos por marcar tras algunos centros de Abraham Cabrera, pero esas intenciones se fueron apagando con el paso de los minutos y la presión que ejerció el cuadro visitante hizo efecto para anular a Siles en la mitad de la cancha.
Petrolero comenzaba a desplegar su juego y gozó de buenas oportunidades para abrir el marcador, mientras que en las gradas la hinchada local se impacientaba por la falta de garra en sus jugadores. Remates de Puña y Escalante hacían tambalear a la última línea de Guabirá. En la réplica contestaba Aguirre con un tiro libre, que pasó cerca del poste derecho del meta Brun (44’).
Con otro ritmo
La primera parte fue para el olvido en Guabirá y eso lo sabía el técnico Justiniano, que decidió sacar a Siles para que ingrese Miguel Ríos. La variante dio resultado porque los azucareros tuvieron mayor volumen ofensivo y en el primer tramo de la segunda mitad pusieron contra las cuerdas a Petrolero con intentos de Aguirre y Espinoza.
Los chaqueños volvieron a tomar el control del juego, buscaron hacer daño por las bandas. Gozaron de una clara chance para marcar en los pies de Puña, que definió de manera displicente ante un Arias prácticamente vencido (61’).
El que perdona, muere. La ley se aplicó minutos después del tanto cantado que erró el volante tarijeño, ya que a los 65’ Mauricio Chajtur cazó un balón que dejó suelto en el área el portero Brun para castigar con derecha y de esa forma abrir el marcador para Guabirá (1-0).
Baldazo de agua fría para la visita, que pagó caro su conformismo sobre el césped y que terminó apretando a su rival en busca de la igualdad con más ganas que con buen fútbol. Los rojos aguantaron la presión, salieron de contra y supieron poner paños fríos al duelo cuando más lo necesitaba, para abrazarse al triunfo después de tres partidos sin ganar.
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