Por las constantes promesas de pago de dos meses de sueldos adeudados que jamás se cumplieron, los jugadores de Guabirá ayer optaron por ingresar en paro indefinido, como medida de presión para que la dirigencia azucarera cumpla con sus obligaciones.
El plantel en pleno ayer se presentó a los entrenamientos, pero luego de una charla, que no duró más de 20 minutos, se decidió por la huelga.
La oferta para los azucareros de parte de la dirigencia era hacer efectivo el pago luego del partido contra Wilstermann, o sea el pasado viernes, pero no ocurrió así.
Luego se les aseguró que se pagaría el martes y tampoco sucedió, ayer esperaban ser llamados para cobrar y nada; en consecuencia todos optaron por la huelga; tomaron sus pertenencias y se marcharon a sus casas.
La sorpresa fue total
El secretario general del club rojo, Elio Salazar, se mostró sorprendido por la decisión del primer plantel. "La verdad esta determinación me toma por sorpresa, pero hoy haremos las gestiones necesarias para solucionar el problema”, afirmó el dirigente.
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