Después de dos años y tres meses, Montero volvió a ser sede de un partido de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano y los hinchas lo vivieron de una manera especial, tras el triunfo agónico de Guabirá sobre Nacional Potosí.
La última vez que el municipio del norte cruceño fue testigo del futbol de primera división fue el 18 de mayo de 2014, en aquel entonces los rojos se impusieron a Bolívar por 2-1, pese a la victoria el descenso de categoría fue inevitable en ese campeonato para los azucareros.
A pesar de haberse estrenado como local en el torneo Apertura, los hinchas de Guabirá no llenaron el estadio Gilberto Parada de Montero, pues en los cuatro sectores de este escenario deportivo se podía apreciar espacios vacíos en las graderías.
Al finalizar el cotejo, los pocos aficionados que se dieron cita para alentar a su equipo salieron contentos por volver a ver a Guabirá en la Liga y porque se quedaron los tres puntos en casa. “Estoy muy feliz por tener a mi equipo nuevamente en la Liga”, dijo Marcos, uno de los hinchas del cuadro norteño.
La premisa en el equipo comandado por Federico Justiniano, es permanecer en el seno liguero, para ello deben ganar todo en su terreno y cosechar unidades fuera de casa.
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