Tras una conversación con el presidente del club Guabirá, Rafael Paz, los jugadores del plantel de Montero decidieron dar por finalizada la medida de presión por el incumplimiento del premio por la obtención del título en el Nacional “B” y regresaron a la actividad cotidiana.
El equipo no trabajó desde el jueves como protesta porque hasta la fecha la dirigencia no le pagó los 20 mil dólares de premio por el título y ascenso a la Liga. En esos días el titular del cuadro azucarero estaba en Paraguay concretando la contratación de otros refuerzos.
De regreso a la ciudad de Montero el dirigente quedó sorprendido por la medida que tomó el grupo -menos los refuerzos Didi Torrico, Delio Ojeda, Yimmi Vaca y Hermán Soliz, además de Adrián Cuéllar- y después de una llamada de atención frenó el paro de actividades.
Paz aceptó la existencia de la deuda, pero opinó que esto no justifica la determinación. Es el único tema pendiente entre el directorio y los jugadores porque con el sueldo está al día y este fue el aspecto utilizado como argumento para calmar las exigencias de los futbolistas.
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