No atraviesa un buen momento personal; justo cuando el volante ofensivo Sebastián Molina peleaba por un puesto en el equipo titular de Guabirá se enfermó de hepatitis A, que se sumó al problema cardiaco de su padre Antonio Luis, que se encuentra en terapia intensiva de la Caja Nacional de Salud luego de haber soportado tres infartos.
El problema de ‘Seba’ comenzó la anterior semana cuando tuvo que donar un litro de sangre para su padre, por lo que quedó débil, luego comió alimentos contaminados y terminó infectado.
El jugador estaba convocado para el partido contra San José, pero justo un día antes de ese duelo comenzó a vomitar, tuvo fiebre y se debilitó. De inmediato fue llevado a un centro médico y, luego de realizarle un estudio, se confirmó que padece hepatitis A. Mañana, puede ser dado de alta.
Entretanto, hoy el DT de Guabirá, David de la Torre, definirá el onceno para visitar a Oriente el domingo. Ayer, el rojo trabajó en una cancha de pasto sintético
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